Cuando las maestras nos sentamos a diseñar una clase para niños pequeños, siempre lo hacemos imaginando cómo van a disfrutar realizando las actividades preparadas para lograr que los niños aprendan, sino que al mismo tiempo lo disfruten. Porque las maestras no somos simplemente unas enseñantes, tenermos que ser verdaderas maestras, que gocen la clase con sus estudiantes, que se preocupe por aquel que aun no alcanza el logro esperado, que ayude a destacar a aquel que posee habilidades pero le da pena mostrarse, que involucre a los padres de familia en ese proceso de aprendizaje.
Los niños se sienten felices cuando tienen que pasar al frente a leer en voz alta, pero para no forzar su voz, es bueno contar con un micrófono porque le ayuda a leer en su tono normal, todos escuchamos y podemos estar atentos para aportarle al compañero y ayudarlo cuando se equivoca, también permite que todos estén atentos porque pueden seguir la lectura y luego participar en la comprensión de la misma.
Expresar sentimientos a través de las tarjetas navideñas es otra buena estrategia para que los niños escriban, les exige que hagan letra bonita para sus destinatarios y además les permite dejar volar su imaginación.
Todos los dias los mismos niños son quienes nos indican el camino a seguir, mostrandonos sus intereses, sus necesidades y sus logros alcanzados, de este modo nos proporcionan información e ideas para realizar las actividades que podemos hacer para lograr que los niños aprendan disfrutando y compartiendo con los demás, vivenciando los valores como: la amistad, la tolerancia, honestidad, respeto, solidaridad, entre otros.
